Considerado una auténtica leyenda en el mundo de la música, Alfred Pee Wee Ellis (Bradenton, Florida, 1941) no solo ha sobresalido durante décadas en el ámbito del jazz, sino también en otros estilos musicales –soul, pop, funk, rhythm and blues…–, merced a los trabajos propios, pero también a numerosas colaboraciones con otros músicos a lo largo de su dilatada carrera. Entre ellos, figuran estrellas como Van Morrison, James Brown, Maceo Parker, Ray Charles, Esther Phillips, George Benson, Hank Crawford… y un largo etcétera que integran decenas de artistas.
No en vano, Pee Wee Ellis es uno de los músicos más solicitados del ámbito anglosajón tanto en su faceta de compositor y arreglista, como de versátil y sólido instrumentista: además de diversos saxos, toca la flauta, el corno, el piano y el órgano. En su vertiente de arreglista, el norteamericano está considerado «el arquitecto» del sonido clásico del soul, fundamentalmente por su trabajo de director musical para James Brown en la década de los 60 del pasado siglo, al introducir los arreglos dinámicos y «ritmos castigadores» que definirían el lenguaje emergente del funk.
Tras iniciar su carrera artística en 1954, pronto empezó a recibir en Nueva York lecciones del gran Sonny Rollins, otra leyenda viva del jazz. Pee Wee Ellis es uno de los pocos músicos que puede presumir de llevar más de medio siglo sobre los escenarios y en los estudios de grabación. En 2015 publicó un doble álbum, The Cologne concerts, número catorce de su discografía como líder, y este mismo año 2006 el cantante británico Paul Carrack ha contado con sus servicios como saxofonista y arreglista de la sección de vientos para el álbum Soul shadows, su más reciente colaboración discográfica de una nómina que supera la soberbia cantidad de unos trescientos títulos entre álbumes y recopilatorios.